Toucher

Resumen 1.

Llegando ya, es bueno hacer unos cuantos "resúmenes de las chochoaventuras" primero:


Para que se diviertan mientras leen, ahora estoy en Pasto.
Regreso de Buenos Aires para notificarme de las desgracias urbanas y suburbanas que rodean esta ciudad (sin perjuicio que en Buenos Aires haya o no las mismas tragedias) pero dios que horror me da (que marica) ver etas calles tan vueltas mierdas que hay por acá, más trágico todavía, no hubo fotos de la Patagonia, pero en realidad no es tan divertido como uno se imagina, la magia patagónica no es más que matorrales a lo largo de 2000 km, pero digo, sólo del lado del atlantico, porque del otro lado si hay montañas y se me hace más divertido, yo no me voy a cansar de quejarme de lo aburrido que fue montarme en ese bus para tener como resultado Rio Gallegos, el presidente de Argentina es de allá y está haciendo una super autopista para llegar a esa ciudad, siempre decíamos, "claro se volverá un polo turístico, la ciudad más fea de argentina y su super autopista"- o- "claro es que Kirschner lo sabe y no quiere que entren a RioGallegos y por eso la autopista". Todos ellos son galeses.

Más de la estupidez.

Como es posible que uno no se vuelva arrogante cuando está rodeado de arrogantes, como es posible que no no sea estúpido, si los que lo han rodeado toda la vida lo son.

Esfuerzos de centurias han tratado de remover esas escorias animaloides que corroen el espíritu humano, lo triste, es que hay gente que a estas alturas de la vida todavía cree en ese espíritu.

Escribo bastante resentido estas cortas líneas, fruto de una, también corta conversación, es maravilloso notar como soy un incoherente y desagradable cuando ellos me encuentran, como sacan de mí eso que yo trato de ocultar tan afanosamente, es que ellos me manejan y me controlan a su antojo, y la relación es divertida, proporcional a la distancia, me siento tan incapaz de moverme, de pensar, de sentir por mí mismo. Veo que todo a su alrededor (pese a la distancia) se encuentra podrido. Siempre lo logran, sacarme de mí, volverme un incoherente, arrogante y estupido, me vuelven como ellos con una facilidad incomprensible. Se divierten haciendolo, se divierten ridiculizandome, dando testimonio de su amor, su interminable ironia. Como me duele que ellos estén en mí, se que para eso no hay procedimientos médicos, están ahí y siempre les huyo, me alejo lo que más puedo, pero me llaman y me gritan. Yo siempre cedo, que falacia.